Pandemia

Del peor desastre siempre se puede aprender, sería uno de los tantos títulos, que con tal de innovar, muchos periodistas, buscan para adornar sus artículos. Creo que deberían muchos o algunos periodistas, aprender que en tiempos de pandemia hay muchas cosas que es mejor no escribirlas. Decía mi abuela, que vivió y murió analfabeta, a los noventa y pico largo años de edad , pero muy sabiamente recalcaba, que no había que hablar de soga en casa del ahorcado . Esta situación que de pandemia se convierte en pandereta, por todo el ruido,el daño, el dolor y el desastre presente y futuro que ocasiona, debería ser un freno para muchas escribas que con tal de llenar espacios, tocan demasiado el tema de la “soga mencionada” en un país donde los “ahorcados” seguimos vivos, en un mundo incierto. En muchos países, con gobiernos menos improvisados, es decir con gente mas preparada, técnica, social y políticamente, hoy aparte del tema social y económico, que agobia y ahoga a mucha gente, estos responsables del gobierno se ocupan de la Salud Mental,, durante y después de la pandemia. La comida es necesaria, la medicina es necesaria, la recreación es necesaria, el movimiento es necesario. Pero ningún equipo pre electoral, tiene en su oferta QUE VAMOS HACER ANTE UNA PANDEMIA. PERO: al ser un equipo de gente Instruida y sensible escoge como candidatos a gente que por lo menos cuenta en su currículum muestras y evidencias de buen criterio. Las tormentas y cataclismos , epidemias y pandemias, siempre existieron y hubo por lo menos por ahora muchos peores de lo que tenemos hoy en el mundo.sin embargo hoy cierto tipo de periodismo hoy, esta creando el campo propicio para el desasosiego y la desesperación,para despertar el estrés, y llamar a la muerte a personas no afectadas en principio por la pandemia o endemia. siembran miedo, terror mas allá de lo que desde el vamos causa el encierro, el desabastecimiento, con y sin plata, adultos que no pueden concurrir a los servicios médicos, con montones de enfermedades crónicas y separados de sus afectos, no hacer sus compras intimas, por Leyes, y resoluciones del que gobierna,que tratando de minimizar el daño de la propia causa , producen estos males llamados colaterales. Reglas morales, ética, moderación en sus relatos, a cronistas, y periodistas, es una recomendación, que no se si se imparten en los centros de formación de éstos en su etapa de capacitación y preparación antes de certificarlos para salir al campo de la OPINIÓN PUBLICA